¿Estamos a setas o estamos a Rolex?
Así reza un chiste vasco que señala que hay que estar centrado en lo que uno hace para que las cosas salgan bien, y si te encuentras un Rolex el día que sales a por setas, ya volverás otro día a por el Rolex, pero no te distraigas.
Este mismo argumento es el que se ha repetido una y otra vez entre la gente de Podemos, y antes entre los indignados del 15M.
Hace ya 5 años, que entusiasmado por los nuevos aires que traían los movimientos indignados, me animé a acercarme al campamento indignado de mi ciudad. “Si hay consenso en cambiar el país, lo conseguiremos” pensaba en ese momento. Qué sorpresa la mía, cuando me encontré de todo menos un movimiento centrado en cambiar el país: La comisión feminista, la comisión de defensa de los derechos de los animales, la comisión espiritual, bla, bla, bla. Pronto llegué a la conclusión de que así no se llegaría lejos. No puedes protestar contra un gobierno diversificando tus fuerzas entre temas que preocupan a una inmensa mayoría de la población y otros que son estrictamente inquietudes de minorías. No me equivoqué, y con la llegada del verano se disipó el movimiento y todo su entusiasmo. Los propios organizadores del movimiento habían espantado a la las multitudes que habían despertado.
Esto es lo mismo que observo con los amigos de Podemos. Si como proclaman nacieron para cambiar el país, ¿a qué viene tanto humo ideológico? ¿Acaso no entienden que solo se puede unir a grandes masas con metas comunes, específicas y concretas? Garantizando sueldos dignos, la libertad de expresión, una ley laboral adecuada de 1º mundo y ánimos reformistas para que se entiendan todos los pueblos españoles entre sí se puede tener la atención de la mayoría de votantes. El resto sobra.
El votante está asustado, y con razón, pensando que con su voto abrirían las puertas a temas minoritarios que no aportan nada al cometido esencial, cambiar el país. Señores antitaurinos, veganos, feministas y lo que quieran. Estamos a setas, y ya volverán otro día a por el Rolex.
No fui a las concentraciones de “rodea el congreso” dejando que la policía nos echase a base de disparos con pelotas de goma para que minorías nos quiten la ilusión con su ideología.
Manuel Nieto Azabal